lunes, 5 de abril de 2010

Cuentos de nuestra infancia...

El otro día encontré un libro que creía perdido entre el desorden de mi habitación: Alicia en el país de las maravillas. No se trata de un libro cualquiera, es una edición de 1953 que ha sobrevivido varias generaciones en mi familia y que ha cruzado el charco más de una vez.

Por los ojos de mi madre se intuía una lagrimilla de emoción cuando se lo enseñé. Recordaba perfectamente que era el primer libro que había caído en sus manos, el primero de tantos que la había hecho soñar, viajar a otros lugares y vivir maravillosas aventuras. Mientras lo abría y acariciaba las tapas me contaba que se lo había regalado su tío, cuando aún era muy niña y que se lo había leído infinidad de veces desde entonces.

Eso me hizo pensar en el primer libro que leí. Y cómo desde ese preciso momento me adentré en el fabuloso mundo de los lectores, desde el que se puede soñar y volar muy alto casi sin moverse del sitio. Hadas, piratas, historias interminables, mundos de sueños, vidas distintas, lugares fantásticos...Mi incursión a este nuevo mundo se llamaba El cartero que se convirtió en carta, ¿recordais cuál fue el primer libro que leisteis? Para mí es imposible olvidarlo...

A la deriva, la barca de los niños
se desliza al trasluz.
Ellos mismos, la voz de su recuerdo
repiten en extraña profecía.
¿Cuántos años tenéis?
No lo sabemos.
Quizá diez, quizá veinte, quizá treinta...
Sólo una cosa es cierta: que aquí estamos
navegando este río de ilusión.
¿Qué importa lo demás?
¿Y tú quien eres, lector? ¿Hombre o mujer?
No importa: niño.
Niño siempre, pues este es tu recuerdo.
Eterniza tu infancia, eterno niño.

-Lewis Carroll, Prefacio de Alicia en el país de las maravillas-

4 comentarios:

  1. Es muy bonito el texto de Carroll, el completo y este extracto. También lo es el libro que tienes, su portada es muy curiosa jeje. Siempre es interesante remontarse a esas épocas felices y sentir esa punzada de melancolía y felicidad al volver a ver las portadas de esos libros mágicos que nos leían y leíamos de pequeños...

    Mi primer recuerdo literario será siempre para "El fantasma de palacio" :)

    Sigue así peque!!!

    ResponderEliminar
  2. Pues mi primer recuerdo de libritos creo que era un serie azul de Barco de Vapor del cual no recuerdo el nombre jo... eso sí, también estaba "El Pirata Garrapata", "Fray Périco y su borrico", "La increíble historia de Vania el forzudo" y muchos, muchos más...
    ¿Cuántas veces hemos hablado de esto? jaja. Un beso, bonito post!!

    ResponderEliminar
  3. Belén! estaba dándome una vuelta por los blogs... así que tú también has caído en las redes de la secta de los blogeros, eh?? me alegro! ahora que sé que tienes uno, te visitaré de vez en cuando.

    Dicho esto, tengo que reconocer que mis primeros libros no los olvido... fueron las aventuras de TEO y todavía los conservo para enseñárselos tal vez algún día a mis hijos. :P

    Mucha suerte... y hasta el próximo post!

    ResponderEliminar
  4. como olvidar al cartero k se convirtió en carta!! me acuerdo q vinieron a dedicárnoslo en el cole y crearon una atmósfera casi mágica que nos dejaron a todos con la boca abierta contándonos cosas del libro y de su autor..todos los libros leídos en la infancia me traen buenos recuerds la verdad :)me viene a la cabeza la imagen de una estanterí llena d libros con polvo dond descubrir nuevas historias y m emociono..
    Que bien escribes leñe! casi es como si estuviera viendo a tu madre con el libro en las manos..bstsss

    ResponderEliminar