martes, 20 de abril de 2010

¡Ah! Bendita picaresca...

Está claro que en situaciones límite nuestro único aliado es, a veces, el ingenio. Pero el ingenio, al menos en España, suele ser sinónimo de delito, "picaresca española" o chanchullos más o menos casposos.

No sé si os habréis enterado, pero, por lo visto, un volcán ha entrado en erupción. Igual si que habéis oído alguna cosa porque algo se ha comentado en los medios...Después de este alarde de sútil sarcasmo (y con sútil quiero decir, por supuesto, evidente) he de decir que he visto en las noticias un nuevo ejemplo de esa "moral relajada" que caracteriza a unos cuantos. El caso era el siguiente: una pareja de ingleses con sus críos se encontraban ansiosos en el aeropuerto con la esperanza de que su vuelo por fin saliera. Durante su espera, unos hombres se les acercaron y les ofrecieron llevarles a su país por el módico precio de 6.000 euros. La pareja sorprendida les contestó rápidamente que no, que no disponían ni por asomo de ese dinero. Atendiendo además a sus instintos, no se fiaban.

Tan sólo unas horas después, se enteraron de que esos mismos caballeros habían estafado a unos holandeses que, confiados, habían accedido a su propuesta. Para más inri, además de quedarse sin los 6.000 euros, les habían robado todo lo que llevaban encima.

Este cuento, como podeis imaginar, tiene moraleja y esta es la siguiente:
No os fieis de desconocidos que os prometan el oro y el moro. Por muchos caramelos que os ofrezcan, no os dejéis engañar por el bello colorido de las golosinas. Especialmente, si quienes los ofrecen tienen pinta rara o de cura. Nunca se sabe quien os puede timar u encontraros lo suficientemente resultones para tratar de llevaros al huerto.

Hasta aquí en consejo del día. Prometo actualizar más y mejor. Si eso es posible :-P

1 comentario:

  1. Yo nunca me fío de extaños que quieran llevarme pa'lo jondo a base de caramelitos con drojas, especialmente después de aquel día... :(

    En fín, que me cago en la picaresca de este país de pandereta que se lucra de las maneras más deshonestas y vergonzantes que existen, donde la moral está perseguida y pobre el profesor que quiera hablar de ética y comportamientos cívicos a los chavales, porque igual le parte la cara algún desaprensivo, de esos que aparcan en doble fila, se saltan los semáforos como les da la gana, beben de más, disfrutan con los culturales toros, creen que por tener cuatro perras y una hipoteca son millonarios y votan al PP, por gilipollas. Así nos va.

    Un beso cosita!
    Escribe más!!!

    ResponderEliminar